Querido Gerardo, me emociona leerte y sentir la nostalgia y desesperación de desear retener lo que nunca se tuvo, de escuchar los lamentos suplicantes de un hombre enamorado que, por haber idealizado amores insulsos, vanos, sufre el olvido de quien amó. Cuantas veces edificamos amores en pasiones, encuentros furtivos, amores prohibidos o inalcanzables? Y es hasta que sentimos que cada gota que emana de la herida, calcina las entrañas, cuando nos damos cuenta de la inexplicable y triste realidad deseando que esa persona que nos enseñó a amarle, también nos enseñe a olvidarle y maravilloso sería que fuera con un beso. Mis felicitaciones por tan pulcro y maravilloso poema.
Querido Gerardo, me emociona leerte y sentir la nostalgia y desesperación de desear retener lo que nunca se tuvo, de escuchar los lamentos suplicantes de un hombre enamorado que, por haber idealizado amores insulsos, vanos, sufre el olvido de quien amó. Cuantas veces edificamos amores en pasiones, encuentros furtivos, amores prohibidos o inalcanzables? Y es hasta que sentimos que cada gota que emana de la herida, calcina las entrañas, cuando nos damos cuenta de la inexplicable y triste realidad deseando que esa persona que nos enseñó a amarle, también nos enseñe a olvidarle y maravilloso sería que fuera con un beso. Mis felicitaciones por tan pulcro y maravilloso poema.
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